Papá Noel, como cada año, hizo una parada en Villalbilla y recopiló un montón de deseos en su buzón mágico, donde fueron a parar todas las cartas de los niños del municipio. Nadie quería perderse esta cita con la ilusión que congregó a colas interminables de familias junto al Centro Cultural de Los Hueros para ver a Papá Noel, su esposa y los renos reales.
La emoción estaba presente en el ambiente y se fue convirtiendo en una dicha algo dulce gracias al roscón y al chocolate calentito que repartió la Asociación de Mujeres de Los Hueros.
Previamente, los niños pudieron desarrollar su imaginación en los talleres de manualidades navideñas donde aprovecharon para confeccionar motivos decorativos para estas fechas. Desde talleres de diademas, coronas navideñas o marionetas. Todas las actividades fueron diseñadas para dibujar una sonrisa en los más pequeños de la casa, que salieron con los adornos preparados para decorar su hogar.
También se entregaron los premios de los ganadores de la XV edición del concurso de postales navideñas “Píntate la navidad”, que recibieron una bonita recompensa a su talento.
A estos eventos navideños tampoco faltaron personajes de lo más singular, como el propio Grinch, que se afanó en un imposible de robar la Navidad.
Y como no pudo conseguirlo, los niños disfrutaron de una tarde entrañable donde los deseos volaban desde sus bolsillos hasta ese buzón de la felicidad que guardaba esperanzas y anhelos, que encerraba el entusiasmo de una infancia que sigue creyendo en la magia.
