La época de festejos es en cualquier municipio una de las fechas más complejas en tema de seguridad, por el gran flujo de personas que convocan, sin embargo, Villalbilla finaliza con un saldo más que positivo estas Fiestas de San Miguel. Las incidencias han sido escasas y poco relevantes ante un sólido dispositivo policial que veló por la tranquilidad y el bienestar de los vecinos de Villalbilla.
Si hacemos una comparativa con municipios aledaños donde las festividades han resultado fuente de importantes conflictos, podemos resaltar que Villalbilla ha destacado en positivo por su capacidad para hacer de una eficiente coordinación un éxito en el balance final. Esta gestión ha proporcionado no sólo un índice mínimo de incidentes, sino también la percepción por parte de sus vecinos de seguridad en las calles lo que ha generado confianza y tranquilidad. Un fuerte dispositivo con un despliegue policial en el que ha participado la totalidad de la plantilla de la Policía Local, algo inédito hasta el momento.
Junto a este dispositivo han colaborado, con eficiente coordinación, la Guardia Civil y los voluntarios de Protección Civil de éste y distintos municipios que se han sumado en materia de seguridad con su capacidad para responder de inmediato a cualquier incidente.
Por otro lado, y no menos importante, se contó con un Punto Violeta para acoger cualquier caso de violencia de género y para facilitar información y formación sobre igualdad. Instalado durante las jornadas festivas de mayor afluencia en distintos puntos del municipio, itinerando por los diferentes espacios para cubrir cualquier posible percance, dando así cabida a aquellos casos de primera necesidad y para prevenir y orientar con su lema “no es no”.
La excelente coordinación entre todas las unidades operativas ha sido crucial para finalizar las fiestas grandes del municipio con un balance inmejorable, que convierten a Villalbilla en un municipio cuya seguridad es un hecho irrefutable.