La crianza positiva debe ser hoy en día el objetivo principal de las familias con hijos e hijas. Con unas buenas pautas de comportamiento y una enseñanza llena de disciplina y medidas que sean sistemáticas, ayudaremos a los niños, niñas y adolescentes a hacer frente a los riesgos y desafíos de violencia general a los que se enfrentan en su vida diaria, fomentando a su vez, su protección en tres niveles:
- A nivel individual para tengan el mejor desarrollo biológico y personal posible, enseñándoles desde las familias las mejores actitudes y comportamientos para que aprendan a aceptar los límites y expresar sus sentimientos cuando no estén de acuerdo con algo.
- A nivel de relaciones interpersonales para que desarrollen unos vínculos afectivos fuertes tanto dentro como fuera de la familia.
- A nivel comunitario promocionando entornos seguros en los centros educativos, los centros de ocio y tiempo libre, y cualquier otro espacio físico exterior como los parques. También fomentando la búsqueda de apoyo de profesionales cuando sea necesario.
Guía de la Prevención de la Violencia desde la Familia
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